Ante una situación de crisis y en un mercado donde la competitividad es muy alta, citroen apuesta por una nueva identidad corporativa y reestructuración de la marca con la aparición del nuevo concepto DS.

La denominación «DS» está inspirada por el Citroën DS (una berlina de cuatro puertas lanzada en 1955, que fue un referente de lujo y novedades tecnológicas en su época), con una reinterpretación de su significado. Ahora, para Citroën, «DS» es «Different Spirit» («Espíritu Diferente»).

Citroën también muestra el nuevo emblema que, en un futuro, tendrán los modelos del fabricante francés.

Por ello y a partir del 2010 lanzará sucesivamente los nuevos módelos DS3, DS4 y DS5 que representarán a los sectores pequeño, medios y grandes de sus coches. Todos ellos con la estrategia de crearnos sensación de placer al conducir, emoción y excitación y orientado al consumidor practico pero con estilo, muy lejos ya de sus primeros modelos tradicionales rígidos. Como ejemplo de esta estrategia tenemos el nuevo C3 Picasso.